¡Escapó de la muerte por centímetros!
El Gran Premio de Hungría de MotoGP estuvo a punto de convertirse en una tragedia. Un escalofriante accidente durante la Q2 casi le cuesta la vida a un camarógrafo. El piloto Pedro Acosta perdió el control de su moto, que salió despedida por el aire y ¡casi impacta de lleno al trabajador!
El incidente ocurrió en la curva 8 del circuito Balaton Park. Acosta, del equipo Red Bull KTM Factory Racing, perdió el control de su moto, una KTM RC16 de 157 kilogramos, que tras la caída, se deslizó a gran velocidad y salió catapultada por encima de las protecciones.
La moto, convertida en un proyectil, se dirigió directamente hacia Joao, el camarógrafo de Dorna, que se encontraba grabando la sesión sobre una plataforma. La imagen es impactante: la moto volando a toda velocidad hacia el trabajador.
Afortunadamente, Joao tuvo una reacción increíble y logró esquivar la moto en el último segundo. Un verdadero milagro. Según informó MotoGP, todos los implicados se encuentran en buen estado de salud.
Reacciones en redes sociales
El video del accidente se viralizó rápidamente en redes sociales. La cuenta oficial de MotoGP en X (antes Twitter) publicó las imágenes con el mensaje: “¡Nuestro camarógrafo, Joao, evitando el impacto de la moto de Pedro Acosta es probablemente el vídeo más impactante que verás hoy! ¡Nos alegra mucho ver que está bien!”.
El incidente generó una ola de comentarios y mensajes de apoyo al camarógrafo, destacando su valentía y reflejos. También se puso de manifiesto la peligrosidad del MotoGP y la importancia de las medidas de seguridad en los circuitos.
- El piloto Pedro Acosta perdió el control de su moto en la curva 8.
- La moto salió despedida por el aire y se dirigió hacia el camarógrafo Joao.
- Joao logró esquivar la moto en el último segundo.
- Todos los implicados se encuentran en buen estado de salud.
Este incidente sirve como recordatorio de los riesgos inherentes al deporte del motor y la necesidad de mantener la máxima precaución en todo momento. Afortunadamente, en esta ocasión, la historia tuvo un final feliz.