Arriazu Advierte: El Futuro del Gobierno en Juego
El reconocido economista Ricardo Arriazu, figura clave en el radar del presidente Javier Milei, lanzó una advertencia contundente: el gobierno debe priorizar la estabilidad cambiaria a toda costa, o enfrentará una derrota electoral devastadora. Arriazu, quien remarca que no conoce personalmente a Milei, subraya que la contención del tipo de cambio es crucial hasta las elecciones, rechazando tajantemente la implementación de un esquema de bandas.
Durante un evento exclusivo organizado por IEB Banca Privada, una de las firmas financieras líderes en Argentina con operaciones que superan los USD 3.000 millones, Arriazu compartió su visión ante un selecto grupo de más de 100 empresarios. En su análisis, el economista destacó los riesgos inherentes a un resultado electoral adverso para el oficialismo, planteando escenarios de alta incertidumbre.
El Escenario Post-Elecciones: Un Gobierno en la Balanza
Según Arriazu, el panorama post-electoral se bifurca en dos caminos principales. El primero, y más favorable para el gobierno, implica asegurar al menos un tercio de las bancas en alguna de las cámaras legislativas. Este respaldo mínimo es vital para evitar un juicio político y garantizar la gobernabilidad. En caso contrario, Arriazu vislumbra un retorno a la "Argentina de siempre", donde la falta de poder político podría paralizar la gestión de Milei.
En el ámbito internacional, Arriazu alertó sobre la posibilidad de un "cisne negro": una peligrosa combinación de guerra comercial y una explosión en la burbuja de activos, similar a la crisis de 1929. Aunque la probabilidad de este escenario ha disminuido, la incertidumbre persiste.
El Desafío Político: La Confianza como Pilar Fundamental
Arriazu enfatizó que el principal desafío de Argentina es de índole política. La economía, en su visión, se sustenta en la confianza. Cuando la confianza es sólida, los ciudadanos consumen, invierten y asumen riesgos, impulsando el crecimiento económico. En cambio, en contextos de desconfianza, el gasto se contrae y la prioridad se centra en la protección de los recursos, generando un riesgo de implosión económica.
La advertencia de Arriazu resuena con fuerza en un contexto político y económico volátil. La capacidad del gobierno para mantener la estabilidad cambiaria y asegurar un respaldo legislativo sólido será determinante para su futuro y el de la Argentina.