Los Florida Panthers se coronaron campeones de la Stanley Cup por segundo año consecutivo, derrotando a los Edmonton Oilers. Este triunfo extiende la sequía canadiense sin obtener el prestigioso trofeo a 32 años, un dolor de cabeza para un país donde el hockey sobre hielo es casi una religión.
Panthers: Dinastía en el hielo
Después de 30 años de espera para su primer campeonato, los Panthers ahora pueden presumir de una dinastía, con dos títulos consecutivos y una tercera aparición en la final de la Stanley Cup. Vencieron a los Oilers en seis juegos, a diferencia de los siete del año pasado, con una victoria contundente de 5-1 el 17 de junio.
Sam Reinhart, autor del gol decisivo en 2024, anotó cuatro goles, mientras que Matthew Tkachuk, recuperado de una grave lesión, selló la victoria este año. Sergei Bobrovsky realizó 28 salvadas cruciales.
El camino al campeonato
A pesar de las lesiones, los Panthers superaron a Tampa Bay Lightning, Toronto Maple Leafs, Carolina Hurricanes y Edmonton Oilers en los playoffs. Su solidez y capacidad para anotar primero en los últimos cinco juegos fueron clave.
Canadá: La maldición continúa
La derrota de los Oilers prolonga la agonía de los fanáticos canadienses, que no ven a un equipo de su país levantar la Stanley Cup desde 1993. A pesar de que aproximadamente el 40% de los jugadores de la NHL son canadienses, el trofeo sigue esquivo.
El año pasado, los Oilers cayeron en el último juego de la serie contra los Panthers. Este año, a pesar de un buen comienzo, la historia se repitió. La esperanza canadiense se desvanece, dejando un sabor amargo en los aficionados.
McDavid: ¿El nuevo Gretzky?
Connor McDavid, estrella de los Oilers, sufre otra derrota en la final. Las comparaciones con Wayne Gretzky son inevitables, pero la presión aumenta. ¿Podrá McDavid liderar a Edmonton a su sexto campeonato?
A pesar de su talento indiscutible, la falta de un título empaña su legado. El tiempo corre y la ventana del campeonato parece cerrarse para McDavid y los Oilers.